Desde el año 1992, gran parte de mi vida profesional la dediqué a la Inteligencia Naval, estoy orgulloso de haber participado y liderado transformaciones que permitieron a la Marina disponer de capacidades relevantes que la destacan. En estos años tuve el privilegio de trabajar junto a distinguidos especialistas, mujeres y hombres excepcionales cuya dedicación y entusiasmo permitieron logros significativos.
En atención a lo anterior, no puedo dejar de dedicar espacio en este sitio a esta actividad que considero fundamental para el país pero que; sin embargo, sigue siendo desconocida e incomprendida, muchas veces despreciada.
Espero contribuir a revertir un poco esta última visión.
Héctor Gómez Arriagada 